martes, 4 de noviembre de 2008

Why is everybody so on the edge tonight?

Es hora de los comics. Hoy leí Joker, una novela gráfica que salió al mercado hace unos días. Los responsables son Brian Azzarello y Lee Bermejo en guión y dibujo respectivamente. Supuestamente es una de las grandes historias que sacó DC Comics en estos días, al menos eso intentan demostrar juzgando por la frase que voy a citar, y que extraje de la web oficial de la editorial: “Not since THE KILLING JOKE have you seen such a powerful tale of The Joker –”

Realmente es algo importante decir que no hubo historias tan buenas como ésta desde 1988, si es que hay que considerarla buena… Es cuestión de gustos, tal vez yo sea una persona clásica. Lo digo más que nada por el arte de Bermejo, quien trata de llevar a los personajes más famosos de Ciudad Gótica a un entorno extremadamente “realista”. Se percibe repetidas veces esta corriente en las historietas contemporáneas. Los personajes cambian de vestimenta y comportamiento con el afán de atraer nuevos lectores y subir las rentas. Esto es comprensible ya que DC Comics es una empresa más, pero dejo sentado que no sería de mi agrado que esto se torne en una costumbre. Los comics se ven muy influenciados por las películas y pierden la esencia original que los hizo personajes de claves de la cultura de las grandes masas. Cada vez menos se visten con colores llamativos y símbolos grotescos como lo hacían antes. Las modas cambian, pero ¿qué diría Conan Doyle si viera a Sherlock Holmes remplazar su gran genio con aparatos de última generación para resolver los misterios que se le presentan?


Ver a Killer Croc siendo una simple persona con leves anomalías dermatológicas, a Dos-Caras sin su traje dividido en dos colores o al Riddler con apenas un acertijo bajo su manga me hace pensar que los distintivos y curiosos personajes que se veían antes se rebajaron a ser simplemente gángsters y matones, adictos a las drogas, violadores, sin esa particularidad que los hacía tan ricos.





El guión no es de los mejores de Azzarello, admito que disfruté mucho más Batman: Boken City, la cuál es una de mis historias favoritas de las que salieron en los últimos años. Como dije antes, es básicamente una historia de gángsters, tocando leves aspectos propios de los personajes secundarios. Encontré un poco monótono y sin sentido que aparezcan tantos personajes fuertes como lo son Killer Croc, El Acertijo, Two-Face, El Pingüino y Harley Queen, entre otros. Sentí que podrían haber sido omitidas algunas partes. Las cicatrices en la boca del Joker, como en The Dark Knight, son un enigma. Supuestamente su sonrisa no concernía ninguna cicatriz, salvo unos pequeños tajos que se hizo él mismo hace poco para hacerle honor a la recién estrenada película del murciélago. Supongo que en ese sentido, los autores se tomar la libertad de salir de continuidad. Lo que me gustó mucho fue el uso de un Batman tácito; con esto quiero decir que aunque no se vea, se percibe. También es notable un trabajo en la personalidad del Guasón que no había sido vista antes. Es algo para recalcar, sea ésta de nuestro agrado o no, el Joker tiene un profundo trabajo en algunos aspectos de su personalidad. Seguro que me gustaron otras cosas, hoy estuve demasiado negativo, pero fue una crítica constructiva, no con el afán de criticar por el simple hecho de hacerlo.

Para concluir, retomando la frase citada al principio y agregando que muchas otras fuentes contrastan esta nueva novela gráfica con The Killing Joke, debo decir que a Joker le falta demasiado para poder llegar a nivelarse con la obra de Alan Moore y Brian Bolland. Si bien el personaje principal está bien tratado, los demás son demasiado expeditos como para ser disfrutados. En cuanto al arte de Brian Bolland, respeto el estilo de Lee Bermejo, pero no creo que pueda compararse al primero; no solo en diseño de personajes, sino también en cómo pudo Bolland narrar tan correctamente la labor del guionista.

1 comentario:

El Aficionado dijo...

Fantastico analisis compañero, soy Loockdown de Psicofx y de verdad que he disfrutado del articulo. Enhorabuena